lunes, 12 de diciembre de 2011

Que significa realmente TRABAJAR

 


Trabajo

La palabra trabajo no proviene del latín labor, que nos dio 'labor', 'laborable' y 'laboratorio', sino de tripalium, que era el nombre de un temible instrumento de tortura.

Tripalium 'tres palos' es un vocablo del bajo latín del siglo VI de nuestra era, época en la cual los reos eran atados a un artefacto de ese nombre, una especie de cepo formado por tres maderos cruzados donde quedaban inmovilizados mientras se les azotaba. 


De tripalium derivó inicialmente tripaliare 'torturar' y, posteriormente,trebajo 'esfuerzo', 'sufrimiento', 'sacrificio'. Trebajo evolucionó hacia trabajo, vinculándose poco a poco con la idea de 'labor'. Lo mismo ocurrió en francés, lengua en la cual tripalium derivó en travail 'trabajo', vocablo al que los ingleses dieron la forma travel y un nuevo significado, asociándola primero a la idea de 'viaje cansador' y, más tarde, simplemente, a 'viaje'.

Así pues vemos el desafortunado origen de la palabra, coincidiendo con el pensamiento judeo - cristiano en el que la necesidad de trabajo es un castigo divino ("ganarás el pan con el sudor de tu frente"). 

Creo que deberíamos cambiar la idea que tenemos tan interiorizada y entender que trabajar debería ser un premio y no un castigo, que dedicarnos a aquello que nos entusiasma (bonita palabra que significa tener a los dioses dentro), es el verdadero triunfo en la vida. Cuando entendemos ésto, que la retribución sea mayor o menor, deja de tener importancia (obviamente siempre que nos permita nuestras necesidades básicas). 

Este cambio de mentalidad debería comenzar en la escuela. Padres y educadores deberíamos tener como principal misión ayudar a nuestros hijos a encontrar su camino, es decir aquello que les apasiona y empujarlos a que lo sigan. Eso es mas importante que el que tengan conocimientos en todas las materias y evaluarlos por ello. El sistema  actual crea gran cantidad de frustración. Que mas da que no sepas de logaritmos si te apasiona la antropología o la danza clásica?.....
Supongo que ante esta reflexión habrá muchas opiniones discrepantes, pero sinceramente es lo que pienso.

Tened un buen día.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Medicina mecanicista o medicina holística..,

En los 30 años que llevo ejerciendo como médico, he ido concienciandome cada vez mas de que el enfoque de la medicina que tenemos en el mundo occidental tiene un fallo de base crucial.

La medicina moderna vio la luz en el renacimiento y en lo que se ha llamado el dualismo cartesiano.    Descartes separo el cuerpo, que concernía a la ciencia, del espíritu, concepto en el cual se incluia todo lo concerniente a la mente, a lo psicológico y al espíritu, que concernía a la iglesia.

Hasta hace relativamente poco tiempo, se concebía la enfermedad como una "avería" del cuerpo humano, y el médico era esa especie de "mecánico" al que el paciente recurre para que lo "repare".  SIn embargo, la medicina oriental tiene una conceptualización mucho mas holística, es decir valorando el cuerpo, mente y espíritu como un todo. Para ellos, la enfermedad se produce cuando ese "todo" pierde su equilibrio y empieza a mal funcionar. El médico o sanador es la persona que ayuda al paciente a que él recupere su propio equilibrio de nuevo y consiga la sanación.

En la medicina mecanicista es fácil caer en los tratamientos básicamente sintomáticos. Osea que tratamos, con algún remedio, el síntoma. 

Pongamos por ejemplo la fiebre. El aumento de temperatura cuando padecemos algún tipo de proceso infeccioso (aunque hay muchas otras patologías que pueden cursar con fiebre), es un mecanismo de defensa imprescindible para vencer la enfermedad. Es un gran invento de la evolución. A mayor temperatura peor funcionamiento de virus y bacterias y mejor trabaja nuestro sistema inmunológico, que es el encargado de combatir la infección. Sin embargo tendemos a considerar la fiebre como una enfermedad en si misma que hay que combatir con antitérmicos (aspirina, paracetamol, etc) y en relaidad lo que hacemos es entorpecer los mecanismos que nuestro cuerpo pone en marcha para recuperar su equilibrio. Lo que suele ocurrir, afortunadamente es que el cuerpo es tan sabio y poderoso que frecuentemente "el paciente se cura a pesar del tratamiento".

Algo similar ocurre con la inflamación. En el mismo momento en que se produce una lesión, el organismo pone en marcha toda una serie de acciones encaminadas a reparar el tejido lesionado. Ese conjunto de acciones se llama proceso inflamatorio. Se produce una dilatación de los vasos sanguíneos que riegan la zona dañada, con gran afluencia de células que se encargan "comerse" las células muertas, y aportar nuevos materiales para que se pueda reconstruir el mismo. Esa dilatación es lo que produce el hinchazón y enrojecimiento de la zona. A la vez liberan una serie de sustancias que estimulan los receptores nerviosos del dolor para que ese dolor nos obligue a mantener la zona dañada inmóvil y así facililtar la restituir el órgano dañado, tanto su forma como su función. Y que es lo que solemos hacer inmediatamente tras una lesión: dar antiinflamatorios que impiden todos esos mecanismos mencionados se produzcan. No se dilatan los vasos sanguíneos, no se aportan células y materiales para reparar, no se activan los receptores del dolor y así nos parece que ya está solucionado el problema y hacemos vida normal, con lo que entorpecemos los procesos de autoreparación del cuerpo e incluso podemos cronificar la lesión.

Afortunadamente, en los últimos años se está produciendo un cambio en la manera de entender la medicina que, aunque lentamente, nos lleva hacia una medicina holística que tiene como base ayudar a que el paciente recupere "ese equilibrio llamado salud."

Hasta pronto

viernes, 25 de noviembre de 2011

Que edad tendrías si no supieras cuantos años tienes.....Las tres edades...

Suele condicionarnos bastante la edad. Hasta el punto de que muchas personas, especialmente mujeres, suelen ocultarla.  Pienso que es un condicionante absurdo puesto que el tiempo transcurrido desde de que nacimos hasta el presente no es, ni de lejos, lo que de verdad importa.

Podríamos decir que hay tres edades básica: 

- La cronológica: solo es el número de años que han transcurrido desde el nacimiento. Osea la del DNI.

- La fisiológica: es la que refleja el grado de envejecimiento de nuestras células. No siempre es directamente proporcional a la cronológica. Depende de varios factores. Uno de ellos, muy importante, es la genética. El proceso de envejecimiento no es el resultado del "desgaste" del cuerpo. Puede considerarse como un"invento" de la evolución. Para que haya evolución debe haber mutaciones genéticas que doten a los organismos de ventajas adaptativas. Si no envejeciéramos y muriéramos no se producirían y no hubiesen evolucionado los organismos.
También es importante el ambiente. Es decir nuestro estilo de vida mas o menos sano: alimentación , ejercicio físico y sobre todo, nivel de resistencia frente al estrés y del grado y tiempo del mismo al que estemos sometido.

- La psicológica:  Sin duda la mas importante. Define la capacidad del individuo para ilusionarse, apasionarse, motivarse en la vida. Es preferible morir vivo que vivir muerto. Hay jóvenes de noventa años y viejos de veinte.  Esta "juventud" psicológica, si bien  puede tener un cierto componente genético, depende básicamente de la personalidad y ésta se forja  y evoluciona constantemente a lo largo de la vida en función de nuestras experiencias. Pero la buena noticia es que se puede moldear. Se puede aprender a vivir apasionadamente. "La felicidad es una actitud de la mente".

- Por último, pienso que también existe el espíritu. No me refiero al concepto religioso de "alma", sino a esa fuerza o energía cósmica o como cada uno quiera llamarle que es lo que nos mantiene vivos. Pero el espíritu  realmente, no tiene edad y es inmortal.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Que significa emoción?

La palabra "emoción", viene del latin "emotio, emotionis", nombre que se deriva del verbo "emovere". Este verbo se forma de "movere", que significa mover o trasladar. Con el prefijo "e-ex"que significa de o desde,  significa retirar, desalojar de un sitio, hacer mover.
Asi pue las emociones son lo que nos saca de nuestro estado habitual, lo que nos mueve a hacer algo.  Sin emociones no hay movimiento, no hay vida, estás "muerto en vida".

Un libro on-line para entender y reflexionar sobre la crisis. Recomiendo su lectura tranquila, objetiva y crítica.

martes, 15 de noviembre de 2011

Estres, ansiedad y angustia: algunas ideas sobre estos conceptos

En el lenguaje habitual, solemos utilizar a menudo estos conceptos. Quisiera explicaros las diferencias que yo entiendo entre ellos:
La palabra estrés, viene de la palabra inglesa "stress" y que tiene múltiples significados, entre ellos tensión, esfuerzo, presión, énfasis, subrayar o insistir. Así cuando decimos que estamos estresados, nos referimos a que estamos sometidos a una fuerza que debemos vencer para avanzar. Pero también decimos " padezco estrés" dando por supuesto que cualquier presión implica padecimiento. Siguiendo el símil físico, vemos que padecer no es inherente a estar estresado. Que padezca o no dependerá de mi capacidad, fuerza o potencia para poder o no vencer esa presión con mayor o menor facilidad.

Resumiendo, lo que pienso es que decir que estoy estresado no da ninguna pista de el grado de sufrimiento que me suponga. Un conserje de un edificio puede sentirse muy estresado y padecer mucho por la responsabilidad, relativamente escasa, que le supone su cargo y sin embargo, el  presidente de una multinacional con miles de empleados, puede tener una responsablidad infinitamente mayor y no padecer en absoluto. Dependerá obviamente de la personalidad y capacidad de cada uno ante su tarea.

Asi pues, estricto senso, deberíamos decir que "el grado de estres al que estoy sometido es superior al que en función de mi personalidad y de mis capacidades actuales puedo afrontar". Claro que es inviable utilizar esta parrafada cada vez que tenemos que usar el concepto y lo resumimos con la simple frase de tener o padecer estrés.

La conclusión es que el estrés depende del individuo y no de las circunstancias.

En cuanto a los conceptos de ansiedad y angustia, tienen que ver con la idea anterior de estrés, ya que serian las emociones derivadas del mismo. Ansiedad se define como temor sin objeto, en el sentido de que sería igual al miedo pero de una amenaza imaginada (""me despedirán", no podré pagar la hipoteca", suspenderé el examen" etc.). La ansiedad moviliza todos los recursos psíquicos y fisiológicos para hacer frente a una amenaza, preparando al cuerpo para la lucha o la huida: se acelera el pulso, aumenta la tensión, se agudizan los sentidos, se liberan "drogas" internas como la adrenalina que nos proporcionan la energía y motivación necesarias para sobrevivir a la amenaza. La ansiedad es movilizadora. El individuo está inquieto, habla rápido, se irrita fácilmente (la ira ayuda en la lucha), en definitiva se prepara para entrar en combate o huir lo mas rápido posible.  Si el individuo llega a sentir en un momento dado que no puede ni luchar ni huir, el estado emocional cambia hacia la angustia. Angustia viene de angosto, que significa "estrechez" se vive como opresión en el pecho (el paciente lo expresa llevándose el puño cerrado a la altura del corazón) y es una emoción inhibidora. El individuo queda inmóvil, tiende a recogerse en posición fetal y es otra estrategia de supervivencia pues "si no me muevo puede que el enemigo me ignore".

En la siguiente entrega expondré por que y como estas emociones, mantenidas en el tiempo, afectan severamente a nuestra salud psicofísica.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Sobre el amar y el querer...

Habitual es en nuestro lenguaje utilizar la expresión "te quiero" con la intención de que la persona a quien va dirigida lo perciba como "mi amor por ti". Cuando pronunciamos esta frase es fácil que la acompañemos con un gesto de una o dos manos que partiendo de la zona del corazón se dirigen hacia el ser amado y se abren. Es una muestra de algo que yo te doy a ti. La expresión "te quiero"  tiende a acompañarse mas frecuentemente del gesto contrario, como si la mano se acerca al sujeto amado y se lleva hacia uno mismo. Es una expresión y gesto de posesión.
EL amar implica dar tu amor y para ello es imprescindible "tenerlo". Es decir que para amar de verdad hay que amarse previamente a uno mismo. No puedes dar lo que no tienes.
Es por eso que personas con baja autoestima tienden a "querer" y las que tienen la autoestima alta tienden "a amar". Y suele ocurrir que las que quieren mas que aman tienden a ser posesivas y celosas, y con su actitud acaban asfixiando a la pareja y la relación se rompe.
Observemos y cuidemos nuestras expresiones pues éstas delatan nuestros verdaderos sentimientos.
Y tu, "amas o quieres"....... piénsalo

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Insisto en el tema de la educación. En este programa de REDES (Eduard Punset) entrevista a Ken Robinson, un autentico visionaria de como creo que será la educación del futuro.

No aprendemos repitiendo de memoria sino haciendo algo que nos emocione. EL sistema educativo actual, basado en la visión de la era industrial, es totalmente anacrónico y desfasado, creando gran frustración en muchos individuos y desperdiciando grandes talentos que jamas se desarrollarán. Está basado en la memoria y la amenaza de un futuro difícil y competitivo, donde conceptos como el sufrimiento, el esfuerzo y la perseverancia deben gobernar nuestras vidas.

Nada mas lejos de la realidad: aprender es divertido.

Solo un sistema educativo moderno,  que entienda que el aprendizaje debe ser una auténtica diversión, basado en la educaión personalizada , que fomente el desarrollo de cada individuo en función de sus talentos y capacidades, que seguro será lo que de verdad le motive y apasione, conseguirá una sociedad capaz de extraer todo el potencial humano de sus individuos, para beneficio de ellos y del conjunto.

Triunfar en la vida no es conseguir dinero, fama y poder, triunfar en la vida es poderse entregar a aquello que nos apasione de verdad, que además, seguro que nos permitirá vivir de ello.

jueves, 27 de octubre de 2011

el problema que tienen las utopías es que se cumplen si uno se pone manos a la obra


OTRO MUNDO ES POSIBLE


Otro mundo es posible


Lo estamos comprobando cada día de muy diversas formas, en pequeños detalles -en nuestras relaciones particulares- y en aspectos y acontecimeintos globales de nuestra sociedad. Estamos viviendo una intensa transformación en la que se va cerrando el paso a actitudes y acciones violentas, totalitarias, manipuladoras... Van perdiendo la falsa fuerza que las "sustentaban" y queda patente su debilidad.

Ahora, quien es capaz de ceder y "perder" manteniendo la dignidad siempre gana.
Aquél que comparte sin miedo siempre gana
Quien deja su orgullo a un lado para poder aprender siempre gana.
Los que saben que la humildad no es sumisión, sino pureza y sencillez, siempre ganan.
Las personas capaces de reconocerse en otras, comprenderlas y amarlas siempre ganan.
Quienes vencen su miedo, sin miedo a tenerlo, ganan también.

La nueva sociedad reclama ser constituida por este tipo de personas que conciben un mundo en el que acabe el concepto de separación y reine la Unidad. Cada vez somos más los que soñamos con ello, independientemente de que podamos fallar como seres humanos que somos, porque en el fondo de nuestros corazones estamos seguros de que otro mundo es posible, y que esa posibilidad comienza en mi responsabilidad y en la tuya, por lo que ya no hay excusa para quejarse ni para dejarse llevar.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Curiosa y sujerente etimologia de la palabra TRABAJO


Si el trabajo es para ti una "tortura", que sepa que se trata de un concepto tan antiguo como el origen de la palabra, que no proviene del latín labor, que nos dio labor, laborable ylaboratorio, sino de tripalium,que era el nombre de un temible instrumento de tortura.
Tripalium ‘tres palos’ es un vocablo del bajo latín del siglo VI de nuestra era, época en la cual los reos eran atados al tripalium,una especie de cepo formado por tres maderos cruzados donde quedaban inmovilizados mientras se les azotaba.
De tripalium derivó inicialmente tripaliare ‘torturar’ y, posteriormente, trebajo‘esfuerzo’, ‘sufrimiento’, ‘sacrificio’.
Trebajo evolucionó hacia trabajo, vinculándose poco a poco con la idea de ‘labor’. Lo mismo ocurrió en francés, lengua en la cual tripalium derivó entravail ‘trabajo’, vocablo al cual los ingleses dieron la forma travel y un nuevo significado, asociándola primero a la idea de viaje cansador y, más tarde, simplemente, a viaje.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Mirad lo que decía Osho en cuanto al conocimiento, el aprendizaje y el desaprendizaje:

<<Asimila más. No hay necesidad de limitarte a tu propia gente. Asimila todo el pasado de todas las gentes de toda la tierra; sé un ciudadano del planeta Tierra. No hay necesidad de limitarse a lo cristiano y a lo hindú y a lo musulmán. ¡Asimílalo todo! El Corán es tuyo, la Biblia es tuya, así como el Talmud, y así como los Vedas y el Tao Te Ching; todo es tuyo. Asimílalo todo, y cuanto más asimiles, más alta será la cima en la que puedes estar y mirar a lo lejos, y tierras lejanas y perspectivas distantes serán tuyas.
…/…
No te hagas más culto, hazte más inocente. Deshazte de todo lo que sabes, olvida todo lo que sabes. Mantente en el asombro, y no transformes el asombro en preguntas porque, cuando se cambia el asombro por una pregunta, tarde o temprano, la pregunta traerá conocimiento, y el conocimiento es una moneda falsa.
Desde el estado de asombro, hay dos caminos: uno es preguntar -equivocado- que te conduce hacia más y más conocimiento. Y el otro es disfrutar. Disfrutar del asombro, de lo asombrosa que es la vida, de lo asombrosa que es la existencia, de lo asombroso que es el sol y su luz y los árboles bañados por sus rayos dorados. Experiméntalo. No lo pongas entre interrogantes y deja que sea tal y como es.>>

jueves, 25 de agosto de 2011

Absolutamente recomendable reflexionar sobre el comentario de una de las mentes mas brillantes del Siglo XX

"No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias.

Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar 'superado'. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones.

Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia.

Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora que es la tragedia de no querer luchar por superarla."

jueves, 11 de agosto de 2011

CRISIS

 Clikad este link y oiréis un cuento sabio que os puede hacer reflexionar sobre el significado de una crisis

http://youtu.be/bSFHe4RjiRs

martes, 26 de julio de 2011

LA SABIDURIA

La Sabiduría es la capacidad para discernir lo que de verdad importa en la vida........
.........lo que de verdad importa en la vida es todo aquello que no se puede comprar.......

DEFINICION DE PERSONALIDAD


Patrón de respuesta cognitiva, emocional y conductual que ante una situación determinada permite prever como pensará, sentirá y actuará el individuo. 


Es constantemente cambiante y se va reprogramando en función de las experiencias vitales.

DEFINICION DE FELICIDAD


La felicidad es un estado emocional que depende de una actitud de la mente capaz de ver la belleza incluso cuando se esconde detrás del horror.......

PROLOGO DEL LIBRO DE MONTSE BALDRICH "LA NOCHE TAMBIEN ES BLANCA"

Hace unos años tuve la fortuna de conocer a Montse. Es una
persona de esas que, cuando tu vida se cruza con ella, no sabes si
es real o es un ángel enviado a la tierra con alguna misión.
Lo cierto es que a lo largo de este tiempo, hemos tenido múltiples
ocasiones para charlar sobre los caminos insondables y
misteriosos de la mente humana. Me impresionó la pasión con la
que buscaba respuestas, preguntaba y preguntaba insaciablemente,
queriendo saber, queriendo entender, queriendo hacer algo.
Y claro que lo ha hecho, creo que con su obra, en mi opinión
magnifica tanto en la forma como en el contenido, manejando
magistralmente la emoción para llegar a la razón, a la
comprensión de lo que significa verdaderamente la enfermedad
mental desde los que de verdad la sufren: el paciente y los que que
aman.
Hace unos días, me llego por email uno de esos power points que
recorren el mundo de ordenador a ordenador y que, en muchas
ocasiones, transmiten cierta dosis de sabiduría popular.
En el, un personaje pregunta a un paciente si padecía locura y éste
le contesta “no padezco locura, la disfruto”....tras unos minutos,
cuando la sonrrisa ya se haia borrado de mis labios y comencé a
reflexionar sobre la sabia respuesta.
Es cierto que la locura, técnicamente llamada esquizofrenia, puede
generar en quien la padece un verdadero infierno. En el transcurso
de mi ejercicio profesional lo he visto en multitud de pacientes,
pero también es cierto que, una vez compensada la fase aguda, nos
encontramos con personas realmente diferentes, muchas veces
persisten síntomas como ideas delirantes o alucinaciones, que no
solo no hacen sufrir al paciente sino que le permiten tener una vida
interior satisfactoria donde frecuentemente son protagonistas. Y no
es menos cierto que, como ha sido objeto en múltiples debates en
congresos psiquiátricos, bajo el titulo de “genio y locura”, nos
damos cuenta que realmente, “para ser un genio hay que estar
loco”, en el sentido de que es esa característica esencial de la
locura, la de poder percibir la realidad y procesarla de una forma
muy diferente a como la hacen el común de los mortales.
He visto muchos pacientes que han sido tratados, medicados con
un solo objetivo: hacer desaparecer cualquier síntoma de la
enfermedad, con lo cual, si bien antes se usaban camisa de fuerza
de tela, ahora se les pone la camisa de fuerza química, dejando
completamente anulado al paciente. Ciertamente ya no delira ni
alucina, pero tampoco tiene sentimientos, emociones y casi es
incapaz de pensar.
No es ese el camino. El paciente debe ser tratado exclusivamente
para que deje de sufrir o sufra lo menos posible, pero conseguido
eso, hemos de aceptarlo tal y como es, con su forma de estar en el
mundo diferente, comprendiéndolo, no excluyéndolo, potenciando
todo lo que es capaz de hacer y crear, que en muchas ocasiones es
mucho.
Creo que Montse ha realizado un trabajo de investigación y
creación magnifico y nos enseña en esta obra, que la mejor de
todas las medicinas es, como siempre, el amor......gracias Montse.
Dr. Antonio García – castrillón Sales
Médico Psiquiatra

Montse Baldrich

jueves, 31 de marzo de 2011

EFECTO PLACEBO: EL PODER CURATIVO DE LA FE


Las primeras manifestaciones de actos realizados por seres humanos con la finalidad de curar enfermedades datan de hace más de 50.000 años. Tenían un carácter mágico-religioso y solían estar a cargo de personajes destacados de las tribus (chamanes, brujos, magos etc.). Aún hoy podemos verlos en las culturas más primitivas que sobreviven en nuestro tiempo.

Por otro lado, las primeras patentes de medicamentos fueron registradas en el siglo XIX. Durante estos 500 siglos, los seres humanos obviamente enfermaban, prácticamente con las mismas enfermedades que sufrimos hoy día y muchos de ellos también sanaban y sobrevivían achacando la responsabilidad de su curación a actuaciones que hoy día sabemos científicamente que por si mismas no tienen ningún poder curativo demostrable.

Entonces, ¿cuál era la causa de su recuperación tras dichas intervenciones?: la fe en que ésta se iba a producir.

La ciencia médica actual corrobora esta afirmación de una forma objetiva y denomina a este fenómeno “efecto placebo”.

El vocablo placebo procede de la palabra “placere”, que significa complacer y su futuro imperfecto del indicativo "placebo", que significa “yo complazco”. Es decir que cualquier acto o sustancia que se ofrece al paciente con el fin de complacer su deseo de recibir algo que le sane.

En 1785 se definió por primera vez en un diccionario médico: como "medica­mento simulado, inerte e inofensivo” .En 1811, el Hoover’s Medical dictionary, lo definió como “ calificativo dado a toda medicación prescrita mas para agradar al paciente que para serle útil”.
En estas y muchas otras definiciones antiguas, vemos que no le reconocen al placebo actividad alguna sobre la salud del paciente que lo recibe.
Actualmente, la definición más aceptada es la de: “sustancia o maniobra realizada para influir en la fisiología del paciente de forma que favorezca la evolución de la enfermedad”

El efecto placebo se puede obtener de diferentes formas.
En primer lugar el placebo farmacológico, que puede ser puro, es decir, sin ninguna actividad biológica (una cápsula llena de azúcar) o impuro, es decir una sustancia que tiene una actividad determinada, pero que no está relacionada con la que buscamos en el paciente (dar un complejo vitamínico para curar una depresión).
Otra forma puede ser un placebo físico, que sería cualquier actuación o maniobra que realizamos en el paciente (como acariciar el abdomen a un niño para curarle el “dolor de barriga”). Y por ultimo también puede hablarse de un placebo psicológico como el hecho de que una conversación amable con un médico atento hace sentir al paciente una mejoría ya antes de tomarse la medicación.

Para entender como funciona éste fenómeno, hemos de saber que el cerebro humano es el órgano que, a parte de las llamadas funciones superiores” como pensar, sentir y recordar, también es el encargado de coordinar, a través del sistemas nervioso y hormonal las funciones de todos los sistemas corporales.

Así, el cerebro recibe una serie de estímulos sensoriales, es decir la información que recogen los órganos de los sentidos, los procesa y como consecuencia de este proceso, envía señales a través del sistema hormonal y nervioso hacia todos los sistemas corporales produciendo cambios en éstos que influirán sobre su función.

El resultado final de esta influencia, dependerá básicamente de las expectativas del paciente sobre la información que recibe. Hay que señalar, que igual que existe un efecto placebo que mejora el estado del paciente, también existe el efecto contrario llamado efecto nocebo (del latin “nocere” que significa perjudicar”). Así si el paciente recibe un fármaco y está convencido de que le sentará mal por que se lo ha dicho un amigo que lo tomo una vez o por que ha leído el prospecto y se ha fijado en los múltiples efectos secundarios que menciona, es muy probable que le produzca un efecto negativo. Si por el contrario le han hablado maravillas del  fármaco o sustancia y la toma convencido de su poder curativo, probablemente mejorará.

Este hecho es tan importante en la investigación farmacológica, que todos los ensayos que se realicen sobre nuevos medicamentos, deben obligatoriamente haber realizado lo que se denomina “ensayo a doble ciego” y que consiste en dar a un grupo de pacientes voluntarios el fármaco a investigar y a otro grupo llamado “control” un medicamento que sea en todo idéntico al anterior pero que no tenga ningún efecto real. Después se valoran los resultados en cada grupo y se comparan. Si el grupo control, que solo ha recibido placebo, mejora por encima de ciertos valores estadísticos se dice que el efecto farmacológico de esa sustancia no es estadísticamente significativa y se desecha como medicamento.

Hay un dato que demuestra que la expectativa del paciente es fundamental en este efecto, y es que los experimentos con placebo solo funcionan en seres humanos y no en los animales ya que a éstos no podemos hacerles entender que tal sustancia les va a mejorar.

Por otro lado los experimentos con placebo son reproducibles, mensurables y predecibles y por tanto son científicos.

En relación con esto, existe una rama de la medicina llamada psico-neuro-endocrino-inmunología que cada vez tiene mayor importancia en la ciencia médica y que estudia como el cerebro, es capaz de alterar positiva o negativamente la actividad del sistema inmunológico, es decir las llamadas “defensas del cuerpo”. El cerebro de una persona animada y contenta por que está convencida de que un tratamiento le va a ayudar, produciría unas sustancias químicas determinadas que a través de la sangre, actuaría sobre las células encargadas de destruir a los virus y bacterias invasoras (también a las células cancerígenas), mejorando su actividad. En caso de que ese cerebro esté desanimado y sin esperanza, no produciría esas sustancias y sus defensas funcionarían peor, resultando una evolución desfavorable de la enfermedad.

Este fenómeno explica como muchas de las llamadas “paramedicinas”, es decir cualquier actuación que se realiza sobre un paciente con fines terapéuticos pero cuyo mecanismo de acción no es demostrable, puede realmente conseguir una mejoría objetiva e incluso la curación de una enfermedad.

En este sentido podemos incluir desde el curandero que con un ritual nos hace desaparecer unas verrugas hasta las curaciones “milagrosas” de un paciente con cáncer que acude con enorme fe y devoción al Santuario de La virgen de Lourdes.

También es probable que las medicinas llamadas alternativas como la acupuntura, la homeopatía y la naturopatía, con un fundamento más científico que las anteriores, basen una gran parte de su incuestionable eficacia en el efecto placebo.

En la historia reciente de la medicina, han surgido frecuentes debates sobre si la utilización del placebo es ética o es una forma de “engañar” al paciente.

En este sentido quiero recordar que existe una máxima en medicina que reza lo siguiente “primum non nocere” y que significa que cualquier fármaco o maniobra terapéutica, debe cumplir, como mínimo, el requisito de no perjudicar al paciente. Si además le beneficia, mejor. Asi pues queda completamente justificada la utilización de un placebo cuando no tenemos nada que realmente sea eficaz para esa dolencia en particular. Además, aunque dispongamos de armas terapéuticas eficaces, si el médico es capaz de utilizarlas con maestría se gana la confianza del paciente y le aumenta su esperanza de curación, con lo que sin duda el resultado final será mucho mas favorable y en definitiva se beneficia al paciente.

A continuación, quiero transcribir la opinión que al respecto han manifestado algunos autores de reconocido prestigio

F. García Alonso, farmacólogo (Centro Nacional de Farmacobiología):
 “muchos los médicos modernos ignoran la eficacia del efecto placebo, que debe administrarse en sus justos términos. Por el contrario, los practicantes de muchas técnicas alternativas lo convierten en la materia prima de terapéuticas no contrastadas".

Dr. Miquel Bruguera, presidente del Col.legi Oficial de Metges de Barcelona:
"los médicos utilizamos constantemente productos que no tienen ninguna actividad farmacológica, pero que en cambio benefician a los enfermos, por tanto hay que reivindicar la utilización del efecto placebo como integrante del arsenal curativo en medicina ".

Sigmund Freud (extractos de la conferencia que pronunció en el Colegio de Médicos de Viena en 1904):
....”la medicina oficial, no explica ni deja explicar, se aferra a la ignorancia de todo saber que ella no produce y puede cuestionar sus concepciones biologistas”......

........“La sugestión involucra fenómenos psíquicos tanto como fisiológicos”...........
.........."sin que el médico se lo proponga, a todo tratamiento por él iniciado se agrega en acto, favoreciéndolo casi siempre, pero también, a veces, contrariándolo, un factor dependiente de la disposición psíquica del enfermo"...................................................
……“Según un dicho muy antiguo, lo que cura estas enfermedades no es la medicina, sino la personalidad del médico, en cuanto él mismo ejerce, por medio de ella, un influjo psíquico”…................................
……“el poder que permite a un médico influir sobre el paciente se debe a su capacidad de inducirle el estado anímico más favorable para la curación, poder que deriva directamente del lugar que ocupa en la relación con el paciente, de ahí la importancia de la libre elección del médico”….


Personalmente suscribo todas estas opiniones y opino que no solo está plenamente justificado la correcta utilización del efecto placebo en medicina, sino que creo firmemente que todos los médicos, sean de la especialidad que sean, y todos los profesionales de la sanidad, deberían formarse en su adecuada utilización. En definitiva es la parte mas humana de la ciencia médica y podemos aseverar que "el placebo es el médico que reside en nuestro interior”.

Dr. Antonio García – Castrillón Sales
Médico especialista en psiquiatría y psicoterapeuta

RENTABILIDAD EMOCIONAL EN LA EMPRESA

Todo lo hacemos es para sentirnos mejor, pero no siempre lo que hacemos nos hace sentir bien.

Esta afirmación es una obviedad, pero si bien “sentirnos bien” es siempre el objetivo, pocas veces acertamos en la estrategia y en la táctica utilizada para conseguirlo.

En el mundo empresarial, suele ponerse en el objetivo último el beneficio económico y muchos empresarios se ven, con el paso del tiempo, atrapados en una dinámica dirigida exclusivamente a aumentarlo más y más. Sin embargo, aunque realmente lo consigan, en realidad no se sienten mejor. Muchas veces incluso pueden sentirse realmente peor, por la presión continua a la que se someten en pos de aumentar la facturación, teniendo que “batallar” continuamente  con la competencia, controlando al personal para que no disminuyan su rendimiento, aumentar la inversión para conseguir un crecimiento continuo e incrementar así los beneficios, etc.

Al final la empresa puede convertirse en un monstruo que engulle al propio creador, el empresario y éste se va enajenando de lo que realmente importa en la vida, reduciéndose todo a unos cuantos conceptos económicos como rentabilidad, ahorro, eficiencia, beneficio fiscal, cuota de mercado, etc.... olvidando aquellos otros que realmente nos hacen sentir mejor, como ilusión, motivación, amistad, salud, satisfacción, etc.

Cierto es que una empresa debe generar ingresos para poder seguir funcionando, creando bienes y puestos de trabajo. El capital es su sangre, sin ella, la empresa muere. Con estos ingresos se pagan los costos y los salarios, se invierte en la ampliación, crecimiento y modernización, así mismo se reparten los beneficios entre los accionistas y de ellos vive el el empresario, pero no es menos cierto que esto no garantiza que realmente nos sintamos mejor.

Por eso creo que hay que pensar de forma diferente. Debemos diseñar empresas que prioricen las emociones. Que el trabajo en ellas produzca grandes dosis de ilusión, tanto en los empleados como en los empresarios o accionistas, que disfruten haciendo lo que hacen, que se sientan satisfechos y orgullosos  de lo que están produciendo o creando o construyendo, y de tener un compromiso social, de lo  que aporta a la sociedad en la que estamos, queramos o no, inmersos y que por ende, también revierte en los propios empresarios y empleados, aunque ello sea a costa disminuir los beneficios económicos, pues solo así conseguiremos una alta rentabilidad emocional.